sábado, 25 de agosto de 2012
Porque no me pongo metas, pero tampoco me prohíbo nada.
Voy a contarte la verdad, simplemente porque lo que me dijiste el otro día hizo que algo dentro de mi se revolviese. Llámalo conciencia, sentido común quizá, aún no lo he decidido. Y es que después de estar hablando tanto tiempo de nosotros y de estos años que hemos compartido, me he dado cuenta de que algunas personas dejan una marca indeleble en el alma que simplemente no desaparece.
Que has dejado una huella en mi alma que soy incapaz de borrar. Que siempre me recuerda el lugar en donde te encuentras. Es como un aviso, una llamada de atención. Que me recuerda, que no importa cuantas veces gire en el camino para no encontrarte...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario